Agencia Reforma
2018-08-08
Ciudad de México–El país no sólo recibe cada año un monto mayor remesas, sino que las familias receptoras mejoran su poder adquisitivo por la depreciación del peso y el bajo nivel de inflación.
De agosto del 2013 a junio del 2018, la capacidad de compra de las familias mexicanas que reciben remesas creció 79 por ciento, según un análisis de Jesús Cervantes, gerente del Centro de Estudios Monetarios de Latinoamerica (Cemla).
“Al cierre de junio del 2018, el monto anual de ingreso por remesas alcanzó en dólares corrientes un incremento acumulado de 46.6 por ciento con relación a su nivel de agosto del 2013, pero su aumento acumulado en pesos constantes, es decir, medido por el poder de compra de los hogares receptores, resultó de 79 por ciento”, indicó el analista.
Entrevistado, el especialista explicó que esto es resultado de la depreciación acumulada del peso con relación al dólar que impactó parcialmente a los precios al consumidor.
“De agosto del 2013 a junio del 2018, el poder de compra de un dólar se incrementó 21.8 por ciento”, mencionó.
“Para el hogar la remesas es como un ingreso de nómina. Que te aumenten 79 por ciento es muchisisísimo. Es un impacto positivo en todas las modalidades de gasto, de manutención, salud, y de micronegocios”, comentó.
Cervantes agregó que pese a la caída de la actividad económica en Estados Unidos por la crisis del 2008, los años siguientes hubo recuperación del empleo, lo que permitió aumento en los ingresos por dólares.
“Es posible que en los siguientes meses sigamos observando aumentos en las remesas en dólares y en pesos constantes, eso depende de que siga aumentando el empleo y las remuneraciones medias de los trabajadores mexicanos y migrantes en Estados Unidos”, aseguró.
Cuestionado sobre las políticas migratorias de Trump, el analista comentó que el temor a ser deportado puede generar que algunos connacionales envíen un monto mayor de remesas.
“Incluso que reenvíen recursos que tenían guardados, como el ahorro. Pueden hacer envíos mayores por el temor de ser deportados, pues al serlo pierden todo lo que tienen”, afirmó.
Recordó que la mitad de los migrantes mexicanos en EU son indocumentados. Por otra parte, detalló que del 2007 al 2016 se redujo el número de mexicanos en EU, bajó en cerca de 160 mil personas.