The New York Times
2018-07-13
Washington— Este jueves la guerra comercial entre Estados Unidos y China no daba indicios de ceder, mientras que Steven Mnuchin, el secretario del Tesoro, dijo a los legisladores no existir ninguna vía clara para una solución y que Pekín arremetió contra el enfoque del gobierno de Trump.
Mnuchin, quien ha intentado evitar referirse como “guerra” a las tensiones comerciales con China, señaló que las pláticas con Pekín se habían “venido abajo” y sugirió ahora depender de China ofrecer concesiones. En Bruselas, el presidente Trump describió las negociaciones comerciales con China como una “fea” batalla.
Los miembros del Comité de Servicios Financieros del Congreso mostraron poca paciencia ante las respuestas de Mnuchin respecto a la falta de avances, presionándolo en repetidas ocasiones en torno a la existencia de alguna estrategia para resolver la guerra comercial y manifestándose preocupados de que ésta estuviera empezando a perjudicar a algunos sectores de la economía.
La Casa Blanca ya ha impuesto a Pekín aranceles sobre importaciones con valor de 34 mil millones de dólares y China respondió con una cantidad similar de gravámenes en productos estadounidenses, como soya, puerco y automóviles. El martes, la administración describió aranceles para otros productos chinos por 200 mil millones de dólares, incluyendo numerosos productos de consumo como muebles, correas para perros y pescado.
A los legisladores de ambos partidos les han llovido quejas de los agricultores de soya, las automotrices, los fabricantes de clavos y otras empresas que se preocupan por las repercusiones en sus industrias ahora que están empezando a afrontar costos más altos en el acero y el aluminio y resienten las represalias europeas y chinas.
El jueves, los legisladores presionaron a Mnuchin, quien es considerado la voz de la moderación comercial en la administración, a fin de que persuada a Trump de dar marcha atrás en la guerra comercial.
Mnuchin defendió el enfoque de la administración e insistió que la prioridad de Trump seguía siendo el crecimiento económico.
Durante audiencia efectuada la mañana del jueves, también los integrantes del Comité de Relaciones Exteriores del Senado presionaron repetida y exasperadamente a otra funcionaria de la administración Trump para que describiera la estrategia destinada a imponerse en la disputa comercial.
“La administración necesita explicar al Congreso a dónde va encaminado todo esto”, dijo el director del comité, el senador republicano Bob Parker, a Manisha Singh, una subsecretaria del Departamento de Estado que se preparaba para comparecer.
“Que yo sepa, no existe una sola persona capaz de explicar a dónde se dirige esto, ni cuáles son los planes, ni cuál es la estrategia”, dijo Corker.
Singh defendió las maniobras de la administración. “Nuestro objetivo es que China modifique su conducta”, contestó Singh.