Abraham Rubio
El Diario
Miles de empleos de la industria maquiladora en Juárez enfrentan amenazas derivadas de los aranceles al aluminio y al acero oficializados ayer por Donald Trump.
Aunque en un inicio México y Canadá quedan exentos, el presidente estadounidense señaló que si no se renegocia un Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) justo para sus trabajadores, la tarifa también se aplicará a ambos países.
El especialista en comercio exterior del despacho fiscal BéndiksenLaw, Víctor Yanar Ríos, señaló que un escenario así golpearía a las subsidiarias localizadas en Juárez de forma indirecta, ya que hay piezas que se importan de Estados Unidos que podrían traer estos gravámenes, debido a que la alta demanda de productos domésticos podría orillar a que la cadena de valor conserve proveedores de países con el impuesto.
La Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero) tienen calculado que alrededor de 10.6 por ciento de los productos siderúrgicos son utilizados por el sector automotriz, mientras que el 18.8 se emplea para la fabricación de productos metálicos (entre ellos los electrodomésticos).
Bajo este escenario, la medida proteccionista del gobierno estadunidense podría repercutir indirectamente a las subsidiarias del sector automotriz y electrónico– rama de la cual dependen 163 mil 616 empleados tan solo en Juárez, de acuerdo con el IMSS– debido al impacto financiero que implicaría en las trasnacionales.
Yanar Ríos afirmó que esta medida será utilizada por Donald Trump para presionar la renegociación del TLCAN a su favor, debido al golpe que podría implicar en comercio exterior para socios vecinos como Canadá y México.
Durante el anuncio, el presidente estadounidense señaló que de no llegara a un acuerdo “justo” en las mesas negociación del acuerdo trilateral aplicará los aranceles.
En tanto, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, declaró que México no dejará que estas presionen las mesas de discusión para la definición del TLCAN 2.0.