Reforma
2017-09-15
Ciudad de México— Aunque se señala que es el bajo costo de la mano de obra mexicana el único atractivo para la industria automotriz, expertos señalan que también se trata de fuerza de trabajo calificada que ha ganado experiencia con los años.
Los recursos humanos han sido clave para la expansión automotriz en México, donde desde el 2000 la producción de automóviles se ha mantenido constante, creciendo a ritmo promedio por año de 5.3 por ciento.
Hoy el país es el séptimo mayor productor de automóviles en el mundo, según la Asociación Internacional de Constructores de Automóviles de 2016, con 3 millones 597 mil unidades.
Distribuidas en 15 entidades federativas, en México operan 9 armadoras: FCA México, Ford, General Motors, Honda, Kia, Mazda, Nissan, Toyota y Volkswagen, cuyos productos terminados se quedan en el mercado nacional y se exportan a más de 90 países diferentes.
“El capital humano, el gran acceso a los mercados y la integración de cadenas de valor, estos tres elementos son los que hacen que México sea una potencia mundial en el sector automotriz”, explicó Armando Cortés, director ejecutivo sectorial de Proméxico.
En conjunto son varios factores los que hacen que el país haya logrado tal especialización en la industria automotriz, pero hay uno que es especialmente importante: la calidad de los recursos humanos.
Para garantizar que a futuro, con el crecimiento esperado, continúe existiendo el personal necesario, la agencia de promoción comercial está trabajando con instituciones académicas.
“Proméxico busca promover el talento e impulsar iniciativas de educación técnica y de educación alta superior, con maestrías y doctorados. Por un lado, se están haciendo esfuerzos para desarrollar educación vocativa dual, para temas técnicos, y por otro con Conacyt para impulsar los altos estudios.
“En la medida que la educación vaya reflejando la oportunidad del mercado habrá una transición más ordenada a las demandas de la industria. Las escuelas no los están formando y nuestro trabajo es mostrar al sistema educativo mostrar cuáles son las necesidades para hablar de cuáles son las necesidades”, precisó.
La realidad salarial en México es innegable y especialistas reconocen que la baja remuneración no corresponde con la elevada calificación lograda.
La Cepal documentó en su último informe que un trabajador de autopartes gana 2.38 dólares la hora, mientras que uno estadounidense, 24 dólares.
“La mano de obra influye en la decisión de establecerse en el país, porque comparado con otros países la calidad es mejor, al grado incluso de calificarla como de excelente y en el top 5 a nivel mundial, además que es barata y sigue siendo barata”, dijo Andrés Lerch, socio líder del sector automotriz de EY.