Reforma
2017-08-13
Ciudad de México— Las interrupciones en la actividad minera de algunos países latinoamericanos como Perú y Chile están impactando favorablemente al precio de los metales preciosos y en aquellos utilizados para la industria.
De enero a julio de 2017, el oro acumula un aumento de 10.17 por ciento, el cobre registra un avance de 14.65 por ciento, mientras que el aluminio y las barras de acero, estos últimos utilizados en mayor cantidad por la industria, han registrado un alza de 8.77 y 27.63 por ciento, respectivamente.
De acuerdo con el Mapa de Justicia ambiental, Chile y Perú mantienen 47 y 79 conflictos mineros, de los que varios han sido de índole laboral que han afectado a grandes mineras en Chile, el principal productor de cobre a nivel mundial.
La restricción de la producción se combinó desde inicios del presente año con una mayor actividad económica de China, el principal país demandante de estas materias primas que se encuentra en un continuo proceso de construcción de infraestructura.
La inercia entre la menor oferta de los metales y mayor demanda por parte de China puede combinarse con la reciente caída del dólar ante una canasta de monedas de países emergentes, evento que beneficiará las compras de los materiales ya que una baja del dólar hace que los metales cotizados en dicha moneda sean más baratos para los compradores de diversas regiones.
De acuerdo con Mike McGlone, estratega de materias primas de Bloomberg Intelligence, desde febrero de 2016 el diferencial entre la demanda y la oferta de metales como el cobre, aluminio, níquel y zinc ha sido el más grande en una década, evento que podría seguir impulsando el precio.
Por otro lado, las presiones externas en los metales como el dólar fuerte a inicios de año y la caída del petróleo pudieron haber suprimido artificialmente los precios de los metales, proporcionando actualmente una oportunidad, dadas las condiciones actuales, para la un mayor impulso de los precios.
Yi Zhu, analista de metales de Bloomberg Intelligence, señala que la reforma política de China es pieza clave para el mercado de metales ya que la demanda doméstica, deprimida en los últimos meses, puede ser contrarrestada por las medidas gubernamentales.
Entre ellas se encuentran el programa de infraestructura nacional para la renovación de barrios marginales, la construcción de proyectos de conservación del agua y el fomento de la consolidación de las empresas estatales.
Las estimaciones del Banco Mundial, apuntan a que el precio de los metales crezca este año 16 por ciento.