Ulises Díaz
Agencia Reforma
Ciudad de México— Las ventas que México hace a China están cayendo, excepto por las de petróleo, según datos del Banco de México.
En el primer semestre del año, las exportaciones fueron por 2 mil 303 millones de dólares, una caída de 4 por ciento respecto al mismo período del año pasado.
Pero el petróleo, que es el segundo producto mexicano que más se vende a ese destino, con ventas por 261 millones de dólares, registró un crecimiento de 10 por ciento.
Mientras, los otros consumibles que se venden hacia ese destino han tenido caídas.
Un producto que se consideraba estrella eran los automóviles ligeros, pero también estas ventas han caído 71 por ciento, según la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
De cobre y sus derivados se han vendido 473 millones de dólares, 5 por ciento menos que en 2015.
“La economía china en los últimos años está creciendo menos de lo que solía hacerlo y su dinámica de compras de materia prima han disminuido, pero eso no quiere decir que esté dejando de comprar”, explicó Enrique Dussel, director del Centro de Estudios China- México de la UNAM.
Durante la primera década del año 2000 y hasta 2015, el modelo de la economía china se basó en un modelo de exportaciones e inversión al exterior.
En esta época, la compra de petróleo, gas, minería y cereales, entre otras materias primas, fue de dos dígitos. Pero ahora, con un cambio que pretende aprovechar el mercado interno, las importaciones se han desacelerado.
“Eso no significa que China va a dejar de exportar, porque va a seguir haciéndolo”, puntualizó Dussel.