Agencia Reforma
2015-05-21
Distrito Federal— En 28 años, la desigualdad de ingreso en México aumentó 0.030 puntos en el Índice de Gini, al pasar de 0.452 puntos en 1985 a 0.482 en 2013, según documenta la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El Índice de Gini es una medición usada para calcular la desigualdad, en el que mientras más cercano a 1, más inequidad hay.
Durante este período, el país no fue la nación OCDE donde más creció la desigualdad, según el estudio “Estamos juntos: menos inequidad nos beneficia a todos”.
En estos años, en Suecia la brecha creció 0.076 puntos, en Nueva Zelanda incrementó en 0.062 puntos y en Finlandia lo hizo en 0.053 puntos.
Sin embargo, estos tres países son de los que menos desigualdad tienen, dado que el coeficiente de Suecia es de 0.274, el de Nueva Zelanda es de 0.333 y el de Finlandia es de 0.262 puntos.
Mientras, la calificación de México muestra que tiene una de las desigualdades más grandes entre la organización.
El país sólo está por debajo de Chile, que tiene un puntaje de 0.503, y poco por encima de Turquía, que tiene 0.412, y Estados Unidos, con 0.401 puntos.
“En la mayor parte de los países, la brecha entre ricos y pobres está en su nivel más alto en 30 años. Hoy, en los países OCDE, el 10 por ciento de la población más rica gana 9.6 veces el ingreso que el 10 por ciento más pobre, mientras que en la década de los ochenta la proporción era de siete veces y en los noventa incrementó a ocho”, precisa el reporte.
El problema con que la desigualdad crezca, en lugar de disminuir, es que esto tiene un impacto en la cohesión social y en el crecimiento económico, ya que la institución estima que debido al factor de desigualdad el crecimiento global se retrasó 4.7 puntos porcentuales debido al potencial desperdiciado en movilidad social.
“La transmisión entre desigualdad y crecimiento está directamente relacionada con la inversión en el capital humano.
“Aunque siempre existe un hueco en educación, especialmente cuando hay diferencias en antecedentes socioeconómicos, la brecha tiende a ampliarse en aquellos países donde la alta desigualdad obliga a que los hogares con más desventaja tengan menos oportunidades de acceder a educación de calidad”, dice el informe.