Bloomberg
2015-04-06
Nueva York— Los 10 años de aumento de las reservas en moneda extranjera de los bancos centrales del mundo están llegando a su fin.
Las reservas globales declinaron en marzo a 11.6 billones de dólares, mientras que en agosto de 2014 eran de un récord de 12.03 billones de dólares, con lo que se detiene un incremento que comenzó en 2004 y llegó a quintuplicarlas, según datos que recopiló Bloomberg.
Si bien la caída podría exagerarse debido a que el fortalecimiento del dólar redujo el valor de otras monedas de reserva, como el euro, de todos modos indica un cambio luego de que los bancos centrales –en su mayor parte correspondientes a países en vías de desarrollo como China y Rusia– incorporaran a sus reservas un promedio de 824 mil millones dólares por año durante la última década.
Más allá de ilustrar el retorno del dólar a su papel de indiscutida moneda dominante del mundo, la declinación de las reservas tiene varias posibles implicaciones para los mercados globales. Podría dificultar a los países de mercados emergentes la tarea de incrementar su masa monetaria y apuntalar un crecimiento económico vacilante; podría profundizar la declinación del euro; y podría también reducir la demanda de bonos del Tesoro de los Estados Unidos.
“Se trata de un gran desafío para los mercados emergentes”, dijo por teléfono Stephen Jen, un ex economista del Fondo Monetario Internacional que contribuyó a fundar Macro Partners en Londres.