Jessika Becerra
Agencia Reforma
Distrito Federal— En el país se han extendido las opciones de créditos inmediatos con pocos requisitos, sin embargo, se paga un alto costo por obtenerlos, según una revisión de Reforma.
Mientras la banca comercial ofrece tasas de interés de 8 y 18 por ciento a los pequeños y medianos empresarios en México, y cobra entre 30 y 40 por ciento en las tarjetas, las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes) y las Sociedades Financieras Populares (Sofipos) aplican tasas de más de 70 por ciento.
Esto, debido a la forma de operar de estos intermediarios, que cobran muy alto el riesgo en el que incurren al otorgar créditos.
En los bancos, la autorización del crédito tiene que pasar por un comité que sesiona en promedio cada tres semanas, y el negocio que solicita el préstamo debe tener al menos dos años de operación.
Además, las empresas que piden el crédito deben tener garantías como un inmueble o maquinaria.
Las Sofomes y Sofipos son más flexibles y toman mayor riesgo al dar crédito, por lo que necesitan cobrar altas tasas para crear reservas en el caso de que sus clientes tengan problemas para pagar créditos, comenta Héctor Valencia, socio director de la consultoría financiera Valmor.
A la vez, tienen la necesidad de desarrollar una base de fondeo cada vez más robusta para dar más crédito y esto hace que sean más costosas que los bancos.
Por ejemplo, la Sofipo Fincomún presta hasta 20 mil pesos para mejorar los negocios que tienen un año de operación y se realizan 52 pagos de 672 pesos, por lo que al final se terminan pagando 34 mil 944 pesos. Esto es una tasa anual de 74 por ciento.
Esto de acuerdo con información proporcionada por una ejecutiva de la sucursal del centro.
A la vez, ofrece un préstamo en efectivo de hasta 7 mil pesos, que se cubren con 52 pagos semanales de 327 pesos. De esta forma el desembolso total es de 17 mil pesos.
“Para muchas personas es más importante cubrir su urgencia, que la cantidad total que van a pagar. Si mejorar tu negocio te va a traer más clientes, te alcanza para pagar el crédito y para tener más ganancias de las que ya tenías”, indicó la ejecutiva.
En noviembre, el Banco de México enfatizó que son los bancos los que deben cuidar a quién otorgan el crédito y emiten tarjetas, pues actualmente lo están haciendo con demasiada “flexibilidad”.
En la Sofom Crédito Familiar da créditos para negocios con tasas de interés de 80 por ciento, pero autoriza a más tardar en una semana.
Luis Fabre, vicepresidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), reconoció que las Sofomes han proliferado y que aún no es clara la información que proporcionan en cuanto a costos.
La ley para la Transparencia y Ordenamiento de Servicios Financieros faculta a la Condusef para revisar que en la publicidad y contratos de adhesión las Sofom y Sofipos sean transparentes.
Esta revisión se realiza por producto, pero al ser más de 4 mil Sofomes registradas, la Condusef queda rebasada para hacer una revisión exhausta.
En este sentido, Juan Guichard, director general de Banco Invex, señaló que el mercado informal de crédito puede propiciar el sobreendeudamiento de familias porque no hay certeza de que reporten y consulten adecuadamente al Buró de Crédito.