El Diario
2014-02-18
El Sistema de Administración Tributaria (SAT) y la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon), encabezarán aquí un foro de capacitación gratuito para los pequeños contribuyentes.
Iván Antonio Pérez Ruiz, delegado estatal de la Prodecon, indicó que el desconocimiento de las nuevas reglas fiscales es uno de los principales problemas que enfrentan los pequeños contribuyentes, por lo que se decidió ofrecer un foro al que puedan asistir miles de contribuyentes.
Migrar del régimen actual de pequeños contribuyentes al general como lo dispone la nueva ley y la implementación de la e-factura, serán los temas principales del fsoro que se realizará el próximo 26 de febrero de 11:00 a 13:00 horas en el Gimnasio Universitario ubicado sobre la calle Mejía en la zona Pronaf.
El delegado de la Prodecon señaló que el SAT continúa saturado de asesorías, por lo que mejor se concluyó abrir un espacio para alcanzar a capacitar y despejar dudas al mayor número de contribuyentes posibles.
Lorenzo Muñoz, líder de los mercados populares de la ciudad, indicó que sólo de los mercados que él representa suman alrededor de mil 500 comerciantes, de los que la mitad están dados de alta bajo el Régimen de Pequeños Contribuyentes (Repecos).
Sin embargo, agregó que ante el desconocimiento y falta de recursos para implementar la factura digital, ya contemplan darse de baja e irse a la informalidad. Señaló que ante el acercamiento de las autoridades hacendarias y su interés por que esto no suceda, acudirán al foro en búsqueda de ayuda y así evitar el cierre de tantos pequeños negocios en la ciudad.
El líder de los comerciantes aseguró que “nosotros queremos pagar y seguir en la formalidad. Si no fuera así no nos hubiéramos dado de alta como Repecos desde un principio, pero ahora sí los cambios fiscales nos rebasan”.
“Andamos buscando la asesoría legal, la gente no sabe pagar y no va a poder, no hay información siquiera de cómo se le va a hacer”, expresó.
Muñoz indicó que gran parte de los Repecos son adultos mayores, lo que complica aún más la situación, pues desconocen totalmente la tecnología y la venta de su comida o ropa de segunda no les deja lo suficiente como para invertir en equipo para expedir la factura digital y mucho menos para contratar a un contador. (Berenice Gaytán)