De origen ganador

Eduardo Morán/El Diario

Desde que tiene uso de razón ha estado rodeado del mundo de las carreras de caballos y eso forjó en él desde muy niño el deseo de ser jockey, siempre acompañado por la pasión y las ganas de triunfar, lo que ha conseguido en numerosas ocasiones durante más de cuarenta años; sin embargo, fue en este año que Mike Smith vio su sueño hecho realidad: ganar la Triple Corona.
“ La primera vez que monté un caballo fue hace mucho tiempo, que para ser honesto apenas si lo recuerdo. Fue en Santa Fe mi primera carrera oficial, eso fue en 1982, y no pasó mucho tiempo después de eso que fui capaz de ganar mi primera carrera, pero han pasado 36 años desde entonces ”, comentó ayer Smith en la visita que realizó al hipódromo de Ruidoso Downs.
Nativo de Roswell, Nuevo México, Smith se convirtió en el 2018 en el jockey número 13 en ganar en el mismo año el Kentucky Derby, el Belmont Stakes y el Preakness Stakes, sobre la monta de Justify, además; a los 52 años es el jinete de mayor edad que lo logra.

-¿Qué significa el
triunfo en la Triple Corona?
“Es un sueño hecho realidad, algo que te cambia la vida, una experiencia increíble, algo que llevas contigo a donde quiera que vayas.”
Smith no olvida sus raíces e incluso el día que ganó la Triple Corona hizo mención en televisión nacional del hipódromo de Ruidoso.
“Aquí es de donde soy, significa mi mundo; Nuevo México, estoy muy orgulloso de ser de aquí; es curioso, la gente habla de Nueva York, pero qué tal Nuevo México (ríe), simplemente es bueno.”

-¿Qué lo llevó a dedicarse a esto?
“Bueno, siempre he estado rodeado de carreras, vengo de una familia que ha estado en esto todo el tiempo, tengo un tío que aquí entrena caballos, me iniciaron en esto y me mantuve en el tamaño correcto y simplemente es algo que quise hacer desde niño.”
El galardonado jockey hizo énfasis en la importancia de hacer lo que a uno le gusta con pasión y también siempre agradecido con Dios.
“Cuando haces algo para lo que tienes una gran pasión, lo haces de la mejor manera. Tal vez el único inconveniente fue en 1998 cuando tuve una fuerte lesión, pero haciendo a un lado eso, ha sido una fantástica carrera para mí, soy muy bendecido. Y siempre hay que orar, no importa si gano, pierdo o empato siempre le doy la gloria a mi Dios y salvador, siempre, siempre.”
Smith agregó que desde muy niño simplemente tenía una pasión por los caballos, “desde que tengo memoria siempre los he montado, y siempre fui muy competitivo en la escuela y quería realmente competir, y en los caballos es algo que podía hacer, pero una vez más, hay que tener una gran pasión para hacerlo posible.”
El aspecto físico también juega un papel importante en cada carrera en la que los jinetes forma parte, y aunado al esfuerzo del caballo, eso puede marcar la diferencia entre ganar o perder una carrera.
“Si lo hice bien en la juventud es porque realmente le dediqué tiempo al trabajo físico, simplemente lo hice un estilo de vida, entrené fuerte, así es que combinas eso con experiencia y tienes un arma letal, y justo ahora la estoy pasando muy bien y físicamente soy capaz de hacerlo a un nivel extremadamente alto ante los jinetes jóvenes y talentosos, entonces por qué no, qué más voy a hacer si no es que montar, eso es lo que he hecho desde que tengo uso de razón, no me imagino no haciéndolo.”

-¿Qué pasó por su mente cuando cruzó la meta en la tercera carrera y ganó la Triple Corona?
“Una ola de emociones, es decir, muchas cosas, es increíble, desearía que hubiera una palabra o algo que pueda decir para describirlo, pero simplemente es un cambio de vida extremo, es el sentimiento de bendición más humilde que puedas imaginar.”
“En la mañana de ese día me sentía muy bien, ciertamente no sabía que iba a ganar, sabía que tenía una oportunidad muy buena de ganar y creía que podíamos ganar si todo se daba bien y simplemente salimos a hacer bien las cosas y en ese punto yo estaba muy feliz y bendecido por la oportunidad. Realmente estaba emocionado por todo.”