Reforma
2018-03-23
México venció 3-0 a Islandia y casi todo fue culpa de Layún.
El futbolista del Sevilla jugó como interior derecho, en uno más de los experimentos en este Tricolor, pero desde esa posición se despachó con un doblete en el Levi’s Stadium; el otro tanto fue un golazo de Marco Fabián.
En la era de Juan Carlos Osorio es tan común que el Tricolor esté lejos de ser brillante como el que gane sus partidos, hasta los más ríspidos.
En el regreso al escenario de las pesadillas, algunos jugadores se aferraron al sueño mundialista, entre ellos Fabián que marcó un golazo al 37’ producto de un tiro libre indirecto. Justo en la víspera el técnico expresaba su dilema entre el volante del Frankfurt y Rodolfo Pizarro ya que el primero le aportaba tiro de media distancia y el segundo conducción; quizá después del partido las dudas sean menos.
Hasta antes de esa anotación había sido Jesús Corona la figura de México, primero tapando un disparo de Birkir Bjarnasson y luego mostrando su potencia de piernas para tapar el balón tras el tiro de Johan Gudmunsson.
Osorio paró al Tri sin laterales. Tres centrales, un mediocentro como Diego Reyes que sufrió una vez más en dicha posición, dos volantes interiores (uno de ellos Layún), dos jugadores pegados a la banda, un mediapunta como Fabián y un grandote como Raúl Jiménez para fungir como poste.
México no había encontrado conjunción. En el primer tiempo se topó con un cuadro ordenado, tozudo como buen vikingo. El gol abrió la puerta. A pesar de que el Tri no le dio toque al rival, sí lo contuvo y fue al 64’ cuando a Hirving Lozano le alcanzó su velocidad para puntear el balón a la llegada de Layún por derecha, quien con un disparo cruzado venció al portero Runar Runnarson.
Islandia ya no compitió futbolísticamente. Optó por las patadas y enganchó a Hirving Lozano y a Layún. El árbitro le perdonó la roja a los europeos, pero también a los mexicanos que perdieron el control emocional. Las dosis de calidad en el Tri las puso Carlos Vela en los minutos que jugó, siempre y cuando se conjuntara con Fabián. Omar Govea y Pizarro tuvieron poco tiempo para mostrarse a la ofensiva, en la penúltima prueba antes de la lista mundialista.
Al 91’ Layún consumó su doblete con un disparo en el que techó al portero, quien esperaba el centro. México no es espectacular, pero gana.
El martes enfrenta en Arlington a Croacia, en la última opción para quien quiera meterse al Mundial de último momento.