Deportes

Todo o nada

Associated Press

2017-10-09

Quito.- La última vez que Lionel Messi no jugó en una Copa del Mundo, la ahora superestrella del futbol era un chico a punto de cumplir 15 años, que acababa de completar su tratamiento hormonal para estimular el crecimiento y apenas empezaba a brindar destellos de su talento singular en las divisiones infantiles del Barcelona.
Eso fue en 2002, cuando una selección de Argentina dirigida por Marcelo Bielsa y encabezada por figuras como Juan Sebastián Verón y Gabriel Batistuta sufrió una inesperada y traumática eliminación en la fase de grupos en Corea del Sur-Japón. Quince años después, y con tres mundiales en las costillas, Messi tendrá que mover su varita mágica una vez más para evitar que la Albiceleste sufra una injuria todavía mayor y se ausente de la Copa del Mundo por primera vez desde 1970.
“Leo para nosotros va a ser muy importante. Me toco dirigir a una Messi increíble, comprometido, asistiendo. Si estamos a la altura de él, vamos a salir adelante”, dijo el técnico de Argentina, Jorge Sampaoli, ayer en rueda de prensa en Guayaquil, Ecuador.
Argentina llega a su duelo de hoy en Ecuador por la última fecha de la eliminatoria sudamericana en el sexto puesto de la tabla, fuera de los cuatro primeros que clasifican a Rusia y del quinto que accede a un repechaje contra Nueva Zelanda. Un triunfo en Quito asegura a Messi y compañía al menos el playoff intercontinental, e incluso podría otorgarles el boleto directo con una combinación de resultados. Un empate o un revés, y quedan a merced de otros resultados.
“Más allá de los números, el equipo merece largamente la clasificación por encima de otros equipos”, opinó el estratega argentino. “Tenemos que hacernos cargo de que somos superiores al resto y tenemos que ir a por ello”.
El puntero Brasil (38) tiene pasaje a Rusia, mientras que Uruguay (28), Chile (26) y Colombia (26) ocupan los otros asientos. Perú (25) tiene el repechaje con las mismas unidades y diferencia de goles que Argentina, aunque una muy superior delantera en goles anotados, el segundo criterio de desempate. Paraguay les sigue con 24.
La última vez que Argentina ganó por las eliminatorias en la altura (2,850 metros) de la capital ecuatoriana fue en 2001, precisamente rumbo a la avasalladora clasificación a aquel Mundial asiático.

X