Associated Press
2017-07-19
Filadelfia— Estados Unidos, cinco veces monarca de la Copa Oro, se llevó el triunfo 2-0 sobre El Salvador gracias a los tantos de Omar González y Eric Lichaj en las postrimerías del primer tiempo. Pero la victoria no fue sencilla ante las diversas desatenciones defensivas en que incurrió durante el segundo tiempo la selección norteamericana, pese a ser reforzada para la recta final del torneo con jugadores de mayor experiencia.
Jozy Altidore, uno de los refuerzos recién llegados, se llevó aparentemente una mordida en un hombro por parte del zaguero Henry Romero, quien además le habría dado un pellizco en el pecho.
El árbitro canadiense Drew Fischer, quien suele actuar en la MLS, no apreció la infracción durante una serie de empujones cerca de la línea de gol a los 57 minutos, antes de que el equipo local ejecutara un saque de esquina.
Furioso, Altidore se tiró al suelo.
Los estadounidenses enviaron de inicio a la cancha a los cinco veteranos que se incorporaron para los cuartos de final. Pero abundaron los pases equivocados, muchos de los cuales derivaron en jugadas claras de peligro que la “Selecta” no supo aprovechar.
Así, quedó lista la primera semifinal, que se llevará a cabo el sábado en Arlington, Texas.
Costa Rica 1, Panamá 0
Un autogol de Aníbal Godoy en el segundo tiempo dio a Costa Rica la victoria por 1-0 sobre Panamá el miércoles, con lo que la selección “tica” se instaló en las semifinales de la Copa Oro.
A los 76 minutos, Godoy saltó dentro del área, en busca de alejar con la cabeza un largo tiro libre que David Guzmán cobró desde la banda izquierda. Sin embargo, el mediocampista de los Earthquakes de San José terminó peinando el balón hacia las redes, lejos del alcance del guardameta José Calderón.
El tiro libre se derivó de una falta que el propio Godoy había cometido sobre Bryan Ruiz, y que le valió la tarjeta amarilla.
Por el boleto a la final, Costa Rica enfrentará el sábado en Arlington a Estados Unidos que venció más tarde 2-0 a El Salvador.
Los “ticos” que no han ganado jamás este certamen, se instalaron por quinta vez en su historia en las semifinales, algo que no conseguían desde 2009.
Panamá, subcampeón en 2013 y tercer lugar en 2015, se va con las manos vacías de un certamen en el que buscaba demostrar el avance que ha conseguido su futbol en la zona.
El progreso por ahora tampoco se ha traducido en un histórico boleto mundialista, que los dirigidos por el colombiano Hernán Darío Gómez seguirán buscando este año, en el hexagonal definitivo de la Concacaf.