Associated Press
2017-06-01
Oakland, California— Kevin Durant se abrió camino por la duela sin que nadie lo tocara para encestar sus clavadas una y otra vez, terminando con 38 puntos, ocho rebotes y ocho asistencias en su primera final de la NBA para Golden State y ayudando a los Warriors a vencer a LeBron James y a los defensores del Campeonato, los Cavaliers de Cleveland, 113 a 91 anoche en el primer partido de la serie.
Stephen Curry anotó 28 puntos con seis disparos de tres y 10 asistencias al comienzo de esta emocionante trilogía, de la que se espera que tenga un espectacular final que nos hemos estado imaginando desde aquel día de julio en el que Durant abandonó Oklahoma City para unirse a los poderosos Warriors.
James terminó con 28 puntos, 15 rebotes y ocho asistencias un día después de haber tenido que lidiar con un acto de intolerancia fuera del mundo del basquetbol. Alguien pintó un insulto racista —la palabra con N— en el portal de su casa en Los Ángeles, obligando a James a tener que hablar de racismo en lugar de su séptima participación consecutiva en una Final, en la que tendría que frenar a Kevin Durant. James dijo que pondría todo de su parte para estar listo para el primer partido de la serie, aunque tuviera su mente en otra parte, preocupado por su esposa y sus hijos, quienes están en Ohio.
Durant castigó a Cleveland por haberlo dejado libre, tomando el balón y llevarlo hasta el aro para encestar enfáticas clavadas como si fuera un hombre con la única misión de hacer exactamente lo que se ha propuesto: ganar un campeonato. Encestó seis clavadas en la primera mitad para los Warriors, quienes mantienen un récord de 13-0 y que ya son el primer equipo que llega a imponer semejante marca en una postemporada invicta.
“Creo que al comienzo del partido estábamos un poco ansiosos y fallamos algunos tiros elevados, dejamos pasar algunas oportunidades”, dijo Durant. “Pero creo que encontramos nuestro ritmo a partir del segundo cuarto en adelante.”
El segundo partido de la serie es el domingo por la noche de vuelta en la Arena Oracle, ante una multitud que seguro abarrotará el recinto.
Kyrie Irving, quien encestó el decisivo tiro de tres puntos con la mano de Curry en su cara el pasado junio cuando Cleveland se recuperó de un déficit de 3-1 en la serie para ganar el primer título de un equipo del deporte profesional para la ciudad de Cleveland en 52 años, anotó 24 puntos en 10 de 22 disparos. Kevin Love amasó 21 rebotes y anotó 15 puntos, mientras que Tristan Thompson se fue con las manos vacías por el transcurso de los cuatro periodos.