Associated Press
2017-01-16
Foxborough, Massachusetts.- Los Patriotas de Nueva Inglaterra tuvieron un respiro al no verse obligados a enfrentar a Ben Roethlisberger durante la victoria de temporada regular que consiguieron en octubre contra los Acereros.
Esta vez el staff de entrenadores de los Patriotas espera a lo mejor de Roethlisberger teniendo en juego la llegada al Super Bowl.
La derrota local 27-16 ante Nueva Inglaterra fue el único partido del que el mariscal de 34 años de los Acereros se ausentó esta campaña debido a una lesión.
Permaneció fuera menos de un mes después de someterse el 17 de octubre a una cirugía a fin de corregir el menisco de la rodilla izquierda. También fue uno de varios jugadores de Pittsburgh que no participaron en el juego final de la temporada regular contra los Cafés para descansar.
El mariscal suplente Landry Jones ocupó su lugar, pero sólo se trató de su tercera participación inicialista en ausencia de Roethlisberger.
Los Acereros superaron en yardas 375-362 a los Patriotas, pero dentro de la yarda 20 lograron uno de cuatro y Jones terminó solamente con un touchdown y una intercepción.
Esta vez Pittsburgh espera, y necesitará, una actuación más sólida en la posición de mariscal.
Ayer el entrenador Bill Belichick dijo que el regreso de Big Ben dificulta sólo hasta cierto grado frenar a las principales opciones ofensivas de los Acereros –el corredor Le’Veon Bell y el receptor Antonio Brown–. Durante el primer encuentro Bell acarreó para 81 yardas y Brown hizo siete atrapadas para 106 yardas.
“Son una ofensiva tremenda. Kansas City pudo hacer algunas jugadas dentro de la yarda 20, pero los Acereros fácilmente pudieron haber estado en la 40”, dijo Belichick.
“Hacen bien muchas cosas; puede correr el ovoide, pueden arrojarlo. Brown es el principal, pero todos los receptores, alas cerradas, corredores, o sea todos son un problema”.
Sin embargo, probablemente los Jefes plantaron la semilla en lo referente a cómo mantener a Roethlisberger fuera de la yarda 20.
Los Acereros no pudieron anotar touchdown durante la victoria divisional 18-16 que el domingo obtuvieron sobre Kansas City. Además en la temporada regular ocuparon la posición número 12 en eficiencia dentro de la yarda 20, anotando touchdown en el 29 por ciento de sus viajes dentro de la yarda 20. En sus llegadas contra Kansas City no concretaron ninguna de cinco.
En el transcurso de 14 partidos de campaña regular, Roethlisberger hizo 13 touchdown con tan sólo tres intercepciones.
Pero en lo que va de los playoffs, Big Ben nada más lleva dos touchdowns aéreos totales y tres intercepciones.
No obstante, la confianza que el personal de entrenadores de los Acereros tiene en que lance balones profundos es algo en lo que esta semana se enfatizará, dijo el coordinador defensivo de los Patriotas Matt Patricia.
Patricia dijo en particular que la calma de Roethlisberger en el interior del bolsillo y la capacidad de su línea ofensiva para protegerlo le ayuda a ganar tiempo a fin de improvisar.
“Si se pueden extender o prolongar esas jugadas, es cuando se vuelve muy difícil”, dijo Patricia. “Creo que ahorita Roehtlisberger tiene mucha movilidad, está muy sano, un hombre que inclusive el domingo volvió a demostrar que un ligero movimiento o un asomo de capacidad para tal vez evadir la presión, o quedarse ahí nada más un poco más da a sus hombres suficiente tiempo para desmarcarse en esas situaciones”.