La excampeona Ronda Rousey, que fuera un fenómeno dentro de la UFC por su controvertida personalidad y conocida llave ‘armbar’, volvió al octágono y Amanda Nunes le recetó de nuevo otro nocaut.
La californiana subió muy decidida a golpear a la rival y a terminarla pronto, pero Nunes, la monarca mundial de la categoría gallo, la silenció rápidamente en la pelea estelar que se celebró en el UFC 207 en la T-Mobile Arena
Rousey terminó con la mirada perdida, tal cual y como Holly Holm la noqueó en noviembre de 2015.
Nunes derrotó a Rousey a los 48 segundos del primer asalto por la vía del nocaut. Así retuvo la corona del UFC.
“Todos piensan en Rousey, ella no existe ya, soy al campeona, piensen en mí”, dijo Nunes tras el combate. “Sabía que le daría una paliza, y le probé ya a todos quién soy”.
Nunes deja ahora su marca en 14-4, mientras que Ronda se queda con 12-2.
Y hubo justicia, pues Rousey se llevó de bolsa garantizada 3 millones de dólares.
Irónicamente, Nunes, quien subió al octágono como monarca, cobró sólo 100 mil billetes verdes.
La bolsa garantizada de Ronda es la más alta en la historia de la compañía de Artes Marciales Mixtas (AMM), empatando lo que devengó Conor McGregor en su segundo pleito ante Nate Díaz en el UFC 202.
Cabe señalar que el irlandés al final se terminó llevando alrededor de 10 millones, pues a eso se le sumaron bonos y ganancias del Pago Por Evento (PPE), algo que no tendrá Rousey.