Associated Press
2016-10-24
Los argumentos son tan largos como una tripleta de Stephen Curry
Con un superequipo en el Oeste, una megaestrella en la zona central, superastros por toda la liga, su popularidad global en su máximo histórico, más ingresos que nunca y la paz laboral acercándose, esta temporada podría ser como ninguna otra que haya tenido la liga. Sí, rivalizando con la racha de los Celtics en los años 60 y tal vez superando a la rivalidad Magic-Bird de los 80 y el reinado de Michael Jordan en los 90. LeBron James es el poseedor del título en Cleveland y Kevin Durant se ha establecido en Golden State, así que en junio próximo las finales de la NBA podrían dirigirse al mismo destino.
Pero llegar allá debe de ser una gran travesía.
“Creo que hay cierta inevitabilidad para que Cleveland y los Warriors vuelvan a encontrarse en las finales, lo cual en ocasiones puede hacer que uno no se dé cuenta de lo disfrutable que puede ser la temporada regular si uno ama el basquetbol”, dijo el analista de ESPN Jeff Van Gundy. “Así que creo que volverán a enfrentarse en las finales, pero eso no hace que la temporada regular me parezca poco interesante”. Una ola de gastos durante el verano generó nuevos equipos con posibilidades de disputar la final así como atractivas preguntas para un público mundial que empezarán a responderse hoy cuando abra la nueva campaña en los lugares donde terminó la última.