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Associated Press

Frisco, Texas.- Después de haberse lastimado una rodilla, Dez Bryant debe de estar listo para regresar cuando Dallas vuelva de su semana de descanso rumbo a un crucial partido contra Filadelfia en la súbitamente difícil NFC Este.
Cuando las Águilas sean visitantes el 30 de octubre, los Vaqueros estarán mucho más cerca de tener que decidir si Tony Romo retoma el trabajo que ahora es de Dak Prescott, el mariscal novato con racha de cinco victorias al hilo.
Desde luego, Dallas tiene este delicado tema debido a haber mejorado registrando la segunda mejor marca en la NFC totalmente sin Romo, a quien una lesión en la espalda dejó fuera, y sin el receptor All-Pro 2014 Bryant por tres juegos.
Y, sí, el entrenador Jason Garrett lo considera un tema espinoso.
“¿Sirve este micrófono?”, dijo ayer un Garrett algo exasperado cuando se cansó de las preguntas sobre Romo, provocando risas cuando los reporteros entendieron el mensaje.
Los Vaqueros (5-1) van ganando de la misma manera que en el 2014, cuando también perdieron el partido inicial como locales y ganaron los siguientes seis rumbo al banderín de la NFC Este con marca de 12-4. Dallas está teniendo una eficaz actuación en la posición de mariscal y está dominando el juego por tierra, lo cual está ayudando a su oportunista defensa.
Pero en vez de Romo y el campeón acarreador de la NFL 2014 DeMarco Murray, están los novatos Prescott y el líder acarreador de la liga Ezekiel Elliott. Y un equipo con muchos otros jugadores jóvenes lleva victorias consecutivas sobre eternos equipos de playoffs como Cincinnati y Green Bay.
“Me sorprende que estemos jugando tan bien como hemos jugado”, dijo el propietario Jerry Jones al término de la victoria 30-16 sobre los Empacadores, apenas la segunda que Dallas consigue en Green Bay. “Nada más queremos que esto siga adelante, sabiendo que en la NFL a uno se le pueden salir las llantas en cualquier momento”.
Si las llantas no se salen, eventualmente Garrett tendrá que contestar las preguntas acerca de Romo vs. Prescott.
Garrett dijo no esperar que Romo, de 36 años, participe hoy en la única práctica del equipo esta semana, lo cual significa que el inicialista desde hace 10 años en Dallas podría empezar a entrenar hasta cuatro días antes del partido contra Filadelfia. En tal caso, sería más posible que regresara para la visita del 6 de noviembre a Cleveland.
Si los Vaqueros derrotan a las Águilas y a otro sobresaliente mariscal novato, Carson Wentz, va a intensificarse el coro a favor de Prescott.
A partir del viernes, dicho coro ha crecido hasta incluir a cuatro prominentes nombres en la historia de los Vaqueros: los mariscales integrantes del Salón de la Fama Roge Staubach y Troy Aikman, el líder acarreador de la NFL de todos los tiempos Emmitt Smith y el mariscal dos veces ganador del Super Bowl Jimmy Johnson.
Básicamente todos manifiestan el mismo razonamiento: en la NFL, no se pone en riesgo el impulso.
“No me gustaría terminar aquí con dos mariscales ganadores y una decisión difícil en lo relativo a quién va a ganar el juego”, dijo guiñendo el ojo Jones. “Creo que disfrutamos ver el progreso de Dak. Me complace el hecho de que cada vez que Romo lanza el balón lo hace a mayor velocidad”.
La semana pasada Bryant regresó a entrenar y quería jugar contra los Empacadores, pero los médicos no le dieron permiso.