Jesús Carvajal / Agencia Reforma
2016-08-24
Monterrey, NL— Los Tigres tuvieron que venir de atrás para vencer 3-1 al Plaza Amador de Panamá, y lograr su segundo triunfo en la Concachampions, que los pone con pie y medio en cuartos de final.
La noche empezó muy oscura para los auriazules, pues a los 22 minutos sorpresivamente ya perdían 1-0.
Jonathan Espericueta retrasó mal un balón y le cayó al delantero Humberto Ward, quien definió con un poco de fortuna sobre la salida de Enrique Palos y la barrida de Miguel Herrera.
Sólo siete minutos después, Palos salvó a su equipo, al tapar un remate de Luis Jaramillo que ya se cantaba como el segundo gol panameño.
Antes de terminar el primer tiempo, Jurgen Damm desbordó por derecha, entró al área y cayó al césped, señalando el árbitro un dudoso penal.
A Espericueta no le importó la polémica marcación y empató los cartones con un cobro a la izquierda del portero, quien se lanzó hacia el otro lado.
Al medio tiempo, los Quiñónes ingresaron a la cancha, y a los 60’, llegó el gol del triunfo.
El arquero visitante dejó un balón suelto en el área con una pésima salida y Fernando Fernández aprovechó el regalo y sólo la empujo al fondo de la red.
Y a los 83’, nuevamente el portero obsequió un gol, al estrellar un intento de despeje en Julián Quiñónes para que el balón se metiera suavemente al arco.
Con el resultado los felinos llegaron a seis puntos mientras que Plaza Amador se quedó con un punto, misma cifra que el Herediano.