Eduardo Morán/El Diario
2015-05-23
Eric Hunter, de Filadelfia, sudó más por el calor originado por las lámparas del Casino Fantasy Springs en Indio, California, que por el esfuerzo hecho en poco menos de un round para noquear al paseño Antonio Escalante.
La velocidad de Hunter fue veneno puro para el boxeador fronterizo en su pleito de anoche que estaba pactado a diez rounds en peso superpluma.
Muy temprano en la pelea Escalante fue mandado a la lona con un cruzado de izquierda directo a la quijada, por lo que le fue aplicada la cuenta de protección.
Pero el daño fue más grande de lo que parecía, pues Hunter fácilmente volvió a impactar con una serie de golpes arriba y abajo, que incluyeron un gacho a la zona hepática y un derechazo al rostro que puso de rodillas a Escalante.
Con mucho trabajo y ya con la mirada algo perdida, el boxeador fronterizo se levantó y, tal vez buscando hacer tiempo para que terminara el round, se sacó el protector bucal, sin embargo el réferi decretó que el combate continuara, solamente para que recibiera más castigo.
Hunter puso a Escalante contra las cuerdas y comenzó a golpearlo a placer una vez más arriba y abajo, hasta que se dio cuenta que el fronterizo prácticamente estaba fuera de combate y con la guardia abierta, le conectó un tremendo recto de derecha a la quijada que lo hizo caer por tercera ocasión.
El réferi no dudo en parar de inmediato el pleito, a los 2 minutos con 45 segundos del round inicial, mientras Escalante quedaba sentado sobre la lona, en pésimas condiciones, con la mirada totalmente perdida, sin entender lo que había pasado arriba del ring.
En otro combate de la cartelera, Abraham López noqueó a los 2:49 del quinto round a Alfred Tetteh, luego de conectarlo con un gancho de izquierda.