Associated Press
2014-10-01
Pittsburgh— Los Gigantes de San Francisco saben lo que hace falta para ganar en esta época del año. Los Piratas de Pittsburgh aún están aprendiendo.
Madison Bumgarner y Brandon Crawford dieron una poderosa lección sobre la diferencia durante el partido de comodín de la Liga Nacional. Bumgarner lanzó un juego con cuatro hits y 10 ponches mientras que Crawford pegó el primer gran slam de algún paracorto en la historia de la postemporada, con los Gigantes apaleando ayer 8-0 a los Piratas.
Después de acallar a la afición vestida de negro que tenía la esperanza de que Pittsburgh volviera a llegar lejos en los playoffs, a partir del viernes San Francisco visitará al campeón de la LN Este, Washington, en la serie divisional.
Gigantes tomaron la delantera gracias al cuadrangular que Crawford pegó en el cuarto inning por el jardín derecho en respuesta a un lanzamiento de Edinson Volquez. Bumgarner se encargó del resto, con San Francisco ganando su octavo partido de postemporada al hilo y el séptimo seguido en peligro de ser eliminado.
Superando a una de las mejores alineaciones de la LN, Bumgarner dio un pase por bolas y consiguió strikes en 79 de 109 lanzamientos en lo que ha sido su más reciente actuación estelar de postemporada. El alto zurdo, quien sólo permitió cuatro sencillos, ha lanzado 15 entradas sin carreras en dos participaciones titulares en la Serie Mundial.
“Es divertido”, dijo Bumgarner. “Si uno no está jugando, puede estar emocionado y nervioso y todo eso. Pero si uno está lanzando en el juego tiene que tratar de hacer todo eso a un lado y tratar de hacer lanzamientos como los que hicimos esta noche”.
Volquez intentaba culminar su sobresaliente temporada de regreso mandando por segundo año consecutivo a Pittsburgh a la serie divisional de la Nacional, pero no pudo igualar a Bumgarner.
El derecho estuvo tranquilo hasta la cuarta, cuando las bases se llenaron con un par de sencillos sin outs. Entonces vino Crawford con batazo que siguió y siguió hasta las tribunas por encima del muro Roberto Clemente de 21 pies de altura para dejar en silencio a la afición más numerosa en los 13 años que lleva el PNC Park.
Eso fue más que suficiente para Bumgarner, quien combinó su bola rápida con un slider al cual aparentemente los Piratas no pudieron responder. Pittsburgh, que esta temporada fue el cuarto de las mayores en hits no sencillos, rara vez logró pegarle con fuerza a la pelota.
A Bumgarner también le ayudó su defensa. El tercera base Pablo Sandoval —con todas sus 245 libras— hizo una voltereta sobre el barandal situado frente al dugout de Pittsburgh a fin de alcanzar el foul elevado que bateó Russell Martin.
Sandoval cayó sobre los pies, como símbolo perfecto del aguante al parecer sin fin de San Francisco al cambiar el calendario a octubre.
De regreso a los playoffs después de ganar la Serie Mundial en el 2010 y el 2012, los Gigantes quieren continuar su éxito de cada tercer año.