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Aguardan veredicto

Agencia Reforma

2014-04-14

París, Francia– El Tribunal de Apelación de la FIA podría tomar una decisión sobre la descalificación del piloto Daniel Ricciardo, en el Gran Premio de Australia.

La escudería Red Bull de Fórmula Uno presentó ayer sus argumentos al Tribunal en una reunión de casi seis horas en la sede de la Federación Internacional del Automóvil, en París.

Red Bull sostuvo que los comisarios de la carrera no debieron quitarle a Ricciardo su segundo lugar ni los 18 puntos que sumó en la carrera.

El abogado de Red Bull, Ali Malek, dijo que un sensor de combustible utilizado en el auto de Ricciardo no era confiable, y que la descalificación se basó en una interpretación “incorrecta y fallida” de las reglas.

En Australia, los comisarios de la FIA determinaron que el auto de Ricciardo excedió las reglas sobre flujo de combustible, que restringen el uso a un máximo de 100 kilogramos por hora en cualquier momento.

Varios equipos rivales de Red Bull, entre ellos Mercedes, McLaren, Williams y Force India, que esta temporada utilizan motores Mercedes, enviaron representantes a la reunión en París.

El abogado de Mercedes, Paul Harris, solicitó que la sanción a Red Bull sea más dura.

Harris señaló que Red Bull violó “descaradamente” las reglas e indicó que los sensores aprobados por la FIA son sometidos a un “riguroso proceso de pruebas y calibrado”.

También argumentó que el propio sistema de Red Bull, que el equipo utilizó para medir el flujo en Melbourne, no es 100 por ciento certero.

Mercedes los critica
Mercedes criticó a Red Bull ayer en un tribunal apelativo en el que se discute la descalificación del piloto Daniel Ricciardo en el Gran Premio de Australia de la Fórmula Uno.

El abogado de Red Bull, Ali Malek, dijo ante el tribunal apelativo de la FIA que un sensor de combustible utilizado en el vehículo de Ricciardo “obviamente no era confiable”, y que la descalificación fue basada en una interpretación “incorrecta y fallida” de las reglas de la F1.

En la carrera del 16 de marzo, los oficiales de la FIA determinaron que el vehículo de Ricciardo excedió las reglas sobre flujo de combustible, que restringen el uso a un máximo de 100 kilogramos por hora en cualquier momento.

El abogado de Mercedes, Paul Harris, indicó ante el tribunal en París que Red Bull violó “descaradamente” las reglas del deporte.

Harris acusó a la escudería austriaca de ignorar a sabiendas y a propósito las instrucciones del comisario de la FIA, Fabrice Lom, de reducir el flujo de combustible al motor del bólido de Ricciardo.

Mercedes dijo que Red Bull no quería afectar la velocidad de su piloto australiano.

Harris indicó que los sensores aprobados por la FIA, que se supone que usen los equipos para medir sus niveles de consumo de combustible, son sometidos a un "riguroso proceso de pruebas y calibrado".

También argumentó que el propio sistema de Red Bull, que el equipo utilizó para medir el combustible de Ricciardo, no es “100 por ciento” certero.

“Red Bull cree que puede elegir entre las medidas”, dijo Harris.

El abogado de la FIA, Jonathan Taylor, señaló al tribunal que la “esencia” del deporte es que todos los competidores cumplan con las mismas reglas.

“Un equipo no puede elegir a su antojo”, afirmó.

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